viernes, 25 de febrero de 2011

LA FELICIDAD


¿LA FELICIDAD? No es fácil conceptuarla pero relativamente fácil es sentirla. Si tratamos de encontrar un concepto exacto, general y de simple comprensión no lo lograríamos... Hay muchas definiciones, una de éstas podría ser: 'La FELICIDAD es un estado interior producido por hechos positivos exteriores.' Sin embargo, a los sencillos, comunes, a quienes nos comunicamos simplemente, esto nos entrega un esclarecimiento muy relativo. Son palabras que tratan de explicar un algo abstracto; un algo que va más allá de lo corporal e, incluso, más allá de lo mental. Es un 'algo' que va mucho más allá que el sentimiento. La felicidad es más cercana a lo personal, a lo individual, no a lo mezquino o egoísta, y se puede hacer general al compartirla. Jesucristo hace ya más de dos mil años, a sus discípulos y a sus seguidores, les entregó la clave para obtener la ansiada FELICIDAD... Sin embargo, la Escritura no señala que El Maestro haya expuesto lo que es realmente, pero si el cómo obtenerla. Si escuchamos, leemos, meditamos y, si logramos encontrar en nuestra existencia siquiera algo de lo que Él ha expuesto en su discurso de vida para la vida, en el Sermón de la Montaña, podremos darnos cuenta que hemos caminado tras sus huellas sin siquiera proponérnoslo Sin embargo, para algunos: La FELICIDAD es la riqueza... el poder poseer todo lo que se desee. Tener un buen automóvil, o un buen trabajo, una buena familia donde los hijos sean fiel reflejo de nuestras ambiciones. Comer bien, pasarlo aún mejor... Fiestas, amigos. Nada de preocupaciones... De esta manera, podríamos extendernos en un tema muy amplio ya que cada uno de nosotros tiene en su 'cerebro' una percepción diferente. Por ejemplo, para mí la FELICIDAD consiste en entregar AMOR. El poder entregar amistad, cariño y servicio, me hace verdaderamente feliz... Creo que quien sale a buscar la felicidad jamás la podrá encontrar, porque la felicidad está en uno mismo. Está en nuestro íntimo y profundo interior, en nuestro corazón. Está donde el soplo divino de Dios, en la Creación, dejó su Espíritu en nosotros cuando nos dio "aliento y vida". La felicidad está en uno mismo. Quien desee ser feliz debe estar dispuesto a dar. AMAR ES ENTREGARSE, es donarse a sí mismo. Dar 'hasta que duela' como dijo el padre Hurtado... Si damos amor recibiremos amor. Si damos servicio no esperemos que nos den agradecimiento o recibir algo a cambio... El Señor, a quien le das, lo transformará en tu amigo y como Él lo dijo: "No hay amor más grande que éste: dar la vida por sus amigos"... Si das amor recibirás amor y el amor en si es la felicidad. JETRÓNC...

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