Mamita, no llores mi
ausencia
Dios ha
querido que vaya junto a Él. Es un lugar tranquilo donde brotan manantiales
transparentes de una belleza que quedarías sin palabras, esta paz jamás podrá
ser imaginada.
Sufres
mucho, y eso me pone triste, piensa que sólo mi cuerpo está lejos de ti. Mi
corazón y mi presencia está contigo, te miro como descansas y también como
lloras en silencio. No lo hagas, aquí
junto al Creador pido que lleve paz a tu corazón para que, cuando descanses,
sientas mi presencia y me hables... Yo te escucho siempre.
Si de
alguna manera te puedo dar conformidad te diré que este es un paraíso maravilloso
donde he visto personas que antes por mi inexperiencia no miraba. ¡Qué necios
somos, aquí ante Dios somos todos iguales!
-Mi enemigo
es mi amigo, y mi amigo es mucho más que eso-
Quisiera
transmitir de alguna manera mi sentir para sacarte de esa pena... Porque
mientras tus lágrimas caen por tus mejillas yo no tengo calma. Entiende...
era mi hora, nadie puede contra el destino y el mío era ir, de cualquier
manera, donde nuestro Creador.
Cuida a mis
hermanos, ellos te necesitan como yo necesito que lo hagas, recuerda que
mientras viva en tu corazón viviré eternamente.
No me
extrañes con tristeza, hubo tantos momentos felices que podemos recordar y
compartir. Tú eres quien más amé en mi vida.
Dios hace lo mejor para cada uno, acata su
voluntad y ten fe, nuestra separación es temporal nos reencontraremos un día y mientras oren
por mi alma yo viviré en ti y en mi familia.
Ayúdame a
buscar esa paz
Te amaré
eternamente.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario